Soy Patxi Giménez, coach estratégico, Ilusionado en que crezcas.
La idea de escribir este post surgió después de un profundo trabajo de marca que dio como resultado esta promesa que me ilumina la cara cada vez que la digo “Ilusionado en que crezcas”.
Me gustaría mucho contarte el proceso seguido así como algunas reflexiones que están apareciendo a raíz de él. Permíteme que te lo cuente, que son muchas cosas y estoy muy ilusionado en ellas.
Fase previa.
Tenía claro que lo primero que debía hacer terminada mi formación como coach era definir mi marca para poder comunicarme contigo y que me reconocieras en la inmensidad del mercado. En ese momento inicial, me sentía un tanto perdido y bastante inseguro por mi desconocimiento de este nuevo entorno para mí. Me sentía rodeado de incertidumbre, con todo un mundo nuevo por descubrir.
Así que mire a mi alrededor y en mi entorno cercano encontré a una persona que me podía ayudar a establecer mi imagen de marca. Tuve la suerte de encontrar a Grace Salazar en mi camino y con ella mentorizándome actualice mi curriculum, amplié mi conocimiento en redes sociales y lo que considero más importante, inicié mi trabajo de imagen de marca. Grace me ayudó mucho a definir la imagen que quería darte en mi faceta profesional como coach y supero mis expectativas al respecto, pero te mentiría si te digo que con ello me sentía listo para salir a darme a conocer. ¿Sabes que me hizo dar el salto inicial? La ilusión. La ilusión me movió a salir a mostrarme para que me reconozcas.
Pues bien, al dar ese primer impulso hacia fuera empecé a encontrar a más colaboradores de mi entorno cercano que enseguida se ofrecieron a colaborar conmigo con toda su ilusión. Gracias a José Carlos por este logo que me encanta y nace del corazón. Y sobre todo gracias a Alex Ferragut por la maravillosa web que me tiene enamorado y que cuida con tanta ilusión.
Así que, con las herramientas adquiridas hasta ese momento, que habitualmente suelen ser menos de las que querría y más de las que realmente necesito, he estado caminado durante esta fase previa. Atendiendo todo lo que me iba viniendo y dando pasos cada vez más seguros, a pesar de los muchos traspiés y resbalones. Siempre hacia delante.
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Promesa de marca, un juego muy serio.
Dentro de este camino de mejora continua había algo que necesitaba clarificar aún más para mejorar mi comunicación contigo. Sin duda era mi promesa de marca. Aquello que mi marca puede prometerte de manera genuina entre el resto de la multitud de opciones que puedes elegir. Descubrí una metodología que llamó mucho mi atención y era ideal para ello, así que mi ilusión me movió a conocerla, por lo que me apunté a un taller explicativo. Así es como me cruce con Juanfa Abad de Innovar Ligero.
Al realizar el taller tuve claro que quería trabajar mi promesa de marca con la metodología de Lego Serious Play. Para ello debía reunir a un grupo de mis colaboradores para trabajar con ellos la perspectiva interna de Patxi Giménez Coach y por otro lado, reunir a un grupo de clientes para que ellos pudieran aportar su visión externa. Por medio de una serie de dinámicas basadas en construir con piezas de Lego, se va trabajando de una manera muy profunda los diferentes aspectos que integran la marca. Finalmente se conectan las dos visiones y fruto de ello se destila la promesa de marca. En mi caso “Ilusionado en que crezcas”.
Ilusionado en que crezcas.
Ahora estoy ilusionado por este proyecto, una ilusión que es necesaria, aunque no suficiente, para iniciar cualquier revolución o cambio. Esta es una ilusión que aparece en las cosas que son verdaderamente importantes para uno mismo. Y ahí está la fuente de ilusión permanente, de la que empleo una parte en este apasionante inicio. La ilusión que genero, la ilusión que me mueve, que me hace vibrar es la ilusión en que crezcas, en estar presente en ese maravilloso proceso en el que te transformas en una mejor versión de ti, una versión de ti más adaptada a tu entorno actual, ese tú que quieres ser.
Innovando constantemente.
Recientemente he tenido la oportunidad de disfrutar nuevamente de la metodología de Lego Serious Play que tanto me fascina, esta vez de la mano de un gran amigo, excelente profesional y mi referente en innovación, como es José Carlos de la Morena. Salgo del proceso ilusionado por contarte la historia…
… Erase una vez una persona empresaria que navegaba en un mar de incertidumbre. Esta persona con MAR disponía de un novedoso sónar que le permitía estar al tanto de las novedades en su trayecto y le mantenía la Mente Abierta a nuevas oportunidades. También contaba con un sobrio sombrero de capitán con el que cubría su cabeza como muestra de Respeto a sus acompañantes, ya que de esta forma guardaba sus juicios y respetaba a todas las personas con las que se encontraba en su valiente empresa de cruzar el mar de incertidumbre.
Con toda seguridad, la persona que capitaneaba con MAR terminaría conduciendo la empresa a su destino, aprovechando las oportunidades conforme el sónar se las mostrase y respetando a sus colaboradores, era cuestión de tiempo.
Y el tiempo pasaba y la empresa andaba moviéndose de oportunidad en oportunidad en todas las direcciones, avanzando y retrocediendo conforme el viento soplaba. Navegaban veloces y siempre con el viento a favor, pero la tripulación empezaba a impacientarse con alcanzar su destino.
La persona que capitaneaba calmaba los ánimos aludiendo a que sus cartas de navegación le indicaban como aprovechar las corrientes. Estas viejas cartas había sido legadas de capitán a capitán desde tiempo inmemorial.
Un día, de forma inesperada, el centro de la tierra se detuvo y las corrientes cambiaron, dejando inservibles las viejas cartas de navegación. La serendipia llevó la nave a una apacible y paradisiaca isla, un sitio ideal para hacer un alto en el camino y replantearse la dirección a seguir. Bajo un techado hecho con hojas de palmera la persona que capitaneaba encontró a un habitante de la isla. La persona que capitaneaba, con animo de encontrar un nuevo rumbo que llevase su empresa hacia su destino pidió consejo al desconocido.
El desconocido lo acompaño a lo largo de la isla, dónde la persona que capitaneaba caminó, se alimentó y encontró un viejo catalejo que le permitía enfocar su visión en el horizonte. Con él la persona que capitaneaba divisó tierra firme y puso rumbo directo hacia allí. Se despidió respetuosamente del desconocido con su sombrero y aprovechando los vientos a favor y las oportunidades que detectaba su sónar en la dirección de su rumbo consiguió llevar a su empresa por el mar de la incertidumbre a su destino en poco tiempo.
Y ahí lo tienes, ahora me encuentro iniciando un nuevo ciclo. Con la promesa de marca definida el #EquipoFamilia de Patxi Giménez Coach ha dado un estirón y podemos decir que estamos “Ilusionados en que crezcas”.
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Gracias por compartir el post con personas empresarias.
Un saludo.
Ilusionado en que crezcas.
Coach Estratégico.